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Por poner un ejemplo, cuestiona el valor absoluto que en general es anunciado en el axioma la manera prosigue a la función, argumentando que de hecho la función a menudo prosigue la forma. Asimismo hace referencia al significado particular según el programa por otro de sus “maestros,” John Summerson, en su búsqueda de las definiciones de teoría en la arquitectura moderna. Los hechos y las interpretaciones de las cuales está compuesta la narrativa de Collins, se expresan de tal forma como para enfatizar su condición auténtica. Se abstiene de usar especificaciones de una naturaleza no arquitectónica, aunque como entonces veremos, en ocasiones traiciona la distancia que lo divide de algunos puntos de la era actualizada.
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La Sociedad Siempre Precede A La Arquitectura
Primero, la historia edifica los cimientos del movimiento moderno ; Entonces asegura la victoria del movimiento y repropone su optimismo (Zevi, Benévolo). El segundo grupo que he llamado el derogative, examina y afirma las reglas para no aplicar la regla —en un caso así, la arquitectura actualizada. Aquí difiere precisamente del enfoque operativo cuyo propósito es, en efecto, detallar una regla.
La historiografía, que tiene relación a los métodos o formas en que se ha realizado la historia, o sea, la crónica de la historia, atendiendo a eso que fué en el pasado. La historiografía, que quiere pensar las maneras en que se ha hecho la historia, la forma en de qué manera se ha pretendido validar cada modelo, la manera de hacer historia. La historiografía, que al recordar los modos de llevar a cabo historia, nos recuerda que la historia está en incesante movimiento. La historiografía, considerada como una reflexión de segundo nivel, es un criterio que escapa al planteo epistemológico de Tornikiotis. Para acabar, Tornikiotis se encarga de argumentar el criterio de historicismo, indicando que este concepto, adquirió su significado en el arte y la arquitectura a lo largo de los años veinte, treinta y a fines de los años cincuenta, o sea, a lo largo del periodo que estudia cerca de la historiografía.
No obstante, el criticismo histórico debería poner sus investigaciones en el lado más lejano de tal análisis y debería tener en consideración solo las pretensiones en las cuales se encontraba basada. Para Tafuri, no hay una razón particularmente para hablar sobre una teoría de la arquitectura. Ya que percibe la historia como un medio para incrementar la conciencia del arquitecto, Tafuri niega algún posibilidad de un intento en construir una teoría de arquitectura. Desde luego, reconoce los análisis de sus contemporáneos, quienes reducen la arquitectura a sus elementos primarios para volver a descubrir no solo una manera de construir formas racionales y controladas, sino asimismo todos los valores estables o constantes que cubren los cambios históricos. Él identifica el punto de comienzo como “la organización activa del dialecto perpetuo entre las permanencias estructurales y los cambios morfológicos” que habían sido propuestos por Giuseppe Samonà en 1959.
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se confina a las genealogías familiares de sus leyentes de los historiadores de la generación previo, amoldando los detalles particulares que dan a las necesidades de su alegato operativo. Al tiempo, la historia moderna acepta su verdadera dimensión como un método educativo, uno que toma una sección activa en la sección de enseñanza devota a la composición arquitectónica.
- Zevi contrastó el nuevo sentido orgánico con el espacio tridimensional contra todos y cada uno de los otros enfoques que se habían aplicado a lo largo de la historia y alrededor del mundo.
Las diferencias surgen también de las definiciones sobre la arquitectura moderna y el modernismo por norma general, si bien en los textos —asegura el autor— estas definiciones no están sostienes a la elaboración teórica sino más bien se trata de definiciones circulares que dependen de las personas, proyectos e ideas que los historiadores del corpus deciden llamar moderno. Esto quiere decir, según Tornikiotis, que hay muchos alegatos sobre los mismos elementos reales y ninguno de ellos afirma la verdad, ninguno de ellos es historia. El capítulo siete, “La historia como crítica de la arquitectura”, es para la Teoria y también storia dell´architettura de Mamfredo Tafuri. Su texto también forma parte lo que Tornikiotis califica como discurso derogativo, y de la misma el alegato de Collins, abate el significado del movimiento moderno para introducir nuevos términos y proponer novedosas direcciones. El capítulo número tres, “La confirmación popular de la arquitectura moderna”, lo dedica al arquitecto Leonardo Benévolo quien en su Storia dell´architettura Moderna, se encarga de reformular los cimientos del movimiento moderno como algo nuevo, pero ya establecido. En el capítulo dos, “El resurgimiento crítico de la arquitectura actualizada”, Tornikiotis elige al arquitecto Bruno Zevi para representar a la primera generación de la posguerra, con sus contenidos escritos Verso un´architecttura; Sapere vedere la architecttura; Architettura y también storiografía y el Linguaggio moderno dell´achitettura.
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“El edificio era esencial solo como contribución a la vida de la región” ; “la escencial importancia de factores higiénicos (sol, aire, vegetación)” ; “la cuadra abierta” ; “edificios con espacios adecuados” . Benévolo aclara que él percibe y admite el término historicismo en el sentido en que lo utilizan los historiadores Anglo-Sajones —o sea, como una descripción de revivals sucesivos— y no en el sentido dado en la historia de la filosofía. Leonardo Benévolo nació en 1923 y estudió arquitectura en Roma, recibiéndose en 1946 poco después de terminada la guerra. Dio Historia de la Arquitectura en Roma, Florencia, Venecia y Palermo, al paso que, como arquitecto practicante, intentó reconciliar los aspectos técnicos e históricos de su trabajo.
creyó que su instantánea aceptación y proliferación demostraba que la silla había sido prácticamente una creación anónima, automática del Zeitgeist —como las producciones del campesino y el salvaje ingeniero / noble, o como el arbotante de Choisy. Sin embargo, la expresión más adecuada de la primera edad de la máquina fue la vivienda Dymaxion de Fuller, la cual produjo las formas más apropiadas para las inauditas máquinas familiares, creando un ámbito para la vida familiar que asemejaba el Zeitgeist reflejado en un espéculo (fig. 5.4). La evolución de las formas arquitectónicas es un proceso incesante y los procedimientos técnicos de los cuales surgen las formas dejan sólo una interpretación literal de ellos en algún momento dado. En ese sentido, la arquitectura debiera percibirse como agua corriendo (en la cuál no puede pisar dos veces) de reflexiones de las transformaciones que suceden en otros campos.
Estos textos establecen el movimiento moderno y lo revelan como victorioso, a pesar de que los autores están sugiriendo diferentes movimientos que ni siquiera distribuyen una genealogía común. Sus contribuciones historiográficas tienen el efecto de llevar a cabo el pasado tópico para vindicar el presente, andando como manifiestos que guían las ocupaciones creativas de una arquitectura dada en el futuro inmediato. COMO UN PROBLEMA TEÓRICO y una especialidad autónoma, la historia del arte se desarrolló en Alemania mucho antes de su aparición en otros países de Europa o en USA. Nikolaus Pevsner, Emil Kaufmann y Sigfried Giedion, todos y cada uno de los historiadores del arte que brotaron de esta tradición alemana, han publicado importantes contenidos escritos hacia el objetivo del período de la entre guerra en que —empleando un procedimiento polémico— se esforzaron por marcar los cimientos del movimiento moderno en la arquitectura y postular varias interpretaciones de su genealogía. Sus textos, y más que nada aquéllos de Pevsner y Giedion (publicados en inglés en sus países adoptivos), pasaron por ediciones sucesivas, nutriendo generación tras generación de arquitectos y jugando un papel decisivo en la formación de la ideología del movimiento moderno. En pocas palabras, ellos han influido intensamente en todos los subsecuentes estudios e investigación de la arquitectura actualizada.